Anteayer y ayer estuve nuevamente de visita en Valencia, hermosa ciudad con sus calles medievales y góticas, su modernísima Ciudad de las Artes y las Ciencias, sus paellas... Chema y Nade nuevamente me hospedaron con mucho afecto, charlas interesantísimas sobre la nueva expedición que Chema emprendió (una expedición de quince días en el Ártico caminando sobre el mar congelado) y muchas otras cosas. La visita terminó con un arroz negro valenciano en la playa.
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