Este post no pretende tener originalidad analítica sobre las PASO en la CABA. Es más bien un rejunte de cosas que fui pensando y leyendo por ahí, más algunas ideas que fui intercambiando con algunas personas via Twitter, chat, etc. Allá vamos:
1. Da algo entre pena, decepción y bronca que la CABA vote como vota. Los ciudadanos de la CABA están (en líneas generales) entre los más privilegiados. No me refiero a niveles de ingresos, que promediando, son los más altos. Me refiero también al hecho de estar contenidos en una estructura urbana que con sus problemas y todo da acceso privilegiado a lo mejor de la cultura que pasa por el país (muchos eventos pasan por muchas ciudades, pero TODOS pasan por Buenos Aires), infraestructura de sistemas de salud (la mayor parte de los consultorios de referencia están en las instituciones públicas y privadas situadas en la Ciudad), educación (ecuelas y universidades de buen nivel para la media del país). Lo que da pena, decepción y bronca es que mucho de lo que falla, falla por lo que los habitantes de la ciudad votan: se vota una ciudad con un gobierno que decide desentenderse cada vez más de lo público, se vota de una manera insolidaria. Me queda la pregunta, tal vez ingenua e inconducente, de si los habitantes de la ciudad se autoperciben así, o si están convencidos de que votando amarillo están votando por la solidaridad, si creen que están votando por la honestidad... ahí hay que ver por qué esa imagen entra tan fuerte, Si es así, la polarización que propone Mariano Recalde (dos modelos de ciudad - dos modelos de país) no tiene sentido: los habitantes de la Ciudad estarían votando una alternativa de un modelo solidario, el resto es verso K con pretensiones de monopolizar y usar electoralmente "los valores que todos compartimos". Si no, el problema está más abajo, y ahí sí que entramos en la confrontación de dos modelos. En esta segunda hipótesis la polarización que propone el FpV via Mariano Recalde (de nuevo, dos modelos de ciudad - dos modelos de país) tendrá un target. Pero está condenado a perder porque la gente no se vuelve solidaria porque se lo diga un candidato. Hay que apuntarle a las nuevas generaciones y dar tiempo a que nuevos valores fermenten.
2. Hay muchas más bromas y chistes sobre el PRO que análisis concienzudo y serio. Es cierto que los globos y los bailecitos no nos dejan una imagen muy edificante, pero eso se termina y ellos quedarán gobernando la mayor ciudad de la Argentina, y quién te dice también Santa Fe, una de las provincias de más peso político y económico del país. Recomiendo mucho la nota de Mario Weinfeld en el Página/12 de hoy, que creo que (para variar) da en el clavo.
3. Fueron hasta ahora cinco elecciones PASO en cinco distritos, dos de ellos son probablemente los más predeciblemente refractarios al FpV. Nada autoriza a la preocupación (si, cualquier alternativa de la oposición me preocupa), pero claramente el la tranquilidad es un error. A no distraerse, la derecha creció, hay aprendizaje, hacen un buen laburo de campo en el sentido de los resultados electorales, Van a hacer una muy buena elección. No significa que les alcance.
4. Los candidatos del FpV a las PASO estan yendo (y continuarán, creo) huérfanos del apoyo de Cristina. No es difíficl entender esta opción por parte de ella. Pero es evidente que el trasvasamiento de votos existe y existirá (si bien no es lineal ni automático, hay que laburarlo, o mejor, hay que militarlo). Eso va a jugar ciertamente a favor de la continuidad de este Proyecto.
5. Probablemente los peores "golpes" en la PASO ya fueron. Habrá que digerirlos como tales. Vendrán algunas victorias y seguramente alguna derrota más también. Pero incluso en las elecciones en las que se vaya bien hay que seguir con la cabeza fría, analizando y entendiendo como si se estuviera perdiendo. Porque cuando se afloja...
6. De puertas para adentro creo que no hay que privarse de putear, putear entre amigos, tirarse de los pelos, etc. A veces hace bien ser menos analítico y darle un par de piñas a una saco de boxeo para descargar. Pero de puertas para adentro.