Medio sorpresivamente, salió la invitación de mi amigo Gerardo Goya (Instituto de Nanociencias de Aragón, Aragón - España) para ir a discutir proyectos de interfase nanotecnología-parasitología, y planear algunos experimentos que nos permitan pensar en nuevas líneas razonamiento en problemas de terapia, diagnóstico y otros de interés por ahí.
Con Gerardo, a quién llamo también "el Goia" y de quién hablo mucho en broma cariñosamente, iniciamos una colaboración científica hace unos cuatro años, y continúa. Para eso, él y su familia me reciben una a dos veces por año en su casa en Zaragoza (ahora en María de Huerva, en los alrededores de Zaragoza) donde compartimos hermosísimas veladas. Debo decir que mi paso por ahí para reencontrarlos y para reencontrar otros amigos de allá se convierte siempre en uno de los puntos más altos del año, por la rara combinación de la cantidad de afecto, las charlas inteligentes e interesantes, todos los registros de sentido del humor (la parte ácida y pesimista siempre a cargo del Goia), la puesta al día científica en áreas para mí siempre novedosas, y las actividades culturales a las que uno tiene acceso. Ya seguiré escribiendo sobre este viaje que comenzará en unos quince días, y sobre las gentes queridas que allí pretendo reencontrar.
Bueno, Ger, Pau, Male y Almudena, preparense que van a recibir visitas!
Con Gerardo, a quién llamo también "el Goia" y de quién hablo mucho en broma cariñosamente, iniciamos una colaboración científica hace unos cuatro años, y continúa. Para eso, él y su familia me reciben una a dos veces por año en su casa en Zaragoza (ahora en María de Huerva, en los alrededores de Zaragoza) donde compartimos hermosísimas veladas. Debo decir que mi paso por ahí para reencontrarlos y para reencontrar otros amigos de allá se convierte siempre en uno de los puntos más altos del año, por la rara combinación de la cantidad de afecto, las charlas inteligentes e interesantes, todos los registros de sentido del humor (la parte ácida y pesimista siempre a cargo del Goia), la puesta al día científica en áreas para mí siempre novedosas, y las actividades culturales a las que uno tiene acceso. Ya seguiré escribiendo sobre este viaje que comenzará en unos quince días, y sobre las gentes queridas que allí pretendo reencontrar.
Bueno, Ger, Pau, Male y Almudena, preparense que van a recibir visitas!
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