El martes nos fuimos al ramal “O remanzinho”, un ramal importante mato adentro. Por varios motivos la experiencia fue inolvidable. Salimos con Marcelo y Gaby (la hija) de Acrelândia a las 5 de la mañana para llegar temprano. Fuimos en dirección a la frontera con Rondônia. Cerca de Nueva California (RO) tomamos el ramal del Remanzinho, que se interna unos 60 km hacia adentro de la selva. Aquí también vimos selva muy fragmentada, a pesar de que la situación es menos impresionante. Hay manchones de selva amazónica de tamaño bastante considerable. Fuimos entrando a través de una fazenda, destrás de la cual están las áreas de desmatamento activo. Es una comunidad asociada al MST, pobres de toda pobreza, tratando de sacarle a la selva el sustento diario. Plantan árboles foráneos para madera, frutales de varios tipos (pequeñas plantaciones de subsistencia de banana, mamón, café, cupuaçú, siringueira entre otros). La gente reconoce el auto con el logo del ICB-USP y se aproxima, preguntan si va a haber atención de emergencias, etc. Gente con todo tipo de problemas. Un hombre con un dedo gangrenado que hace semanas que viene usando un remedio casero porque no es atendido, una señora cuyo nieto estga temblando de fiebre debido a la malaria, un hombre que siente un dolor de cabeza que no para, alguien que pasó ahí la noche anterior y avisó que la chiquita, pariente de no sé quien duerme un día sí y uno no, probablemente malaria causada por Plasmodium vivax (como leído en los libros de texto que enseño en la USP)… Marcelo atiende al chiquito que no para de temblar, pide las referencias para ir a ver a la nenita… y así vamos entrando en el ramal, encontrando personas necesitadas de una charla, de un minuto de atención, que se desesperan por ofrecer lo poco que tienen. Las imágenes de los chiquitos temblando de fiebre, llorando de sueño, de no haber podido dormir, de dolor de cabeza… ir selva adentro para buscar a una mamá, pincharles el dedito para hacer un frotis en lámina y salir corriendo a buscar la próxima muestra, juntar y catalogar todo para llevar al microscopio y diagnosticar… fue muy fuerte. Pero vale la pena. La sensación de que se puede ayudar es fantástica. Organizamos una atención tipo guardia para ocho de los estudiantes de medicina para el sábado en un puesto (una casilla de madera). Y ahora a ver qué resulta.
2 comentarios:
por favor cuidate. Espero que tengas los recursos suficientes. tu mamá preocupada te abraza fuerte
Saludos Ariel! esta buena la descripcion! Cuando puedas, fotos!!
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